FALLÓ LA RELACIÓN MÉDICO-PACIENTE
“El actor estadounidense, Robin Williams, de 63 años, fue encontrado muerto en su casa
en California”… una inesperada y triste noticia que une a todos los que en momentos
de ocio vivenciamos al unísono con sus irradiaciones que nos brindaba en cada
una de sus interpretaciones, pero ahora
con irremediable pesar porque el final no es de un guión si no de ausencia
total.
La Depresión es una
enfermedad, y la relación médico-paciente es reforzar en todo momento la
terapia medicamentosa… es labor del médico, escudriñar que hay de detrás de la
máscara que Robin Williams era experto en disfrazar y el médico no era inconsciente
de los dotes histriónicas, por lo cual no hay atenuantes.
¿Qué era más atroz
que la muerte? La desesperanza, es más dolorosa que ejecutar la
autoeliminación, y cuanto más atormentada buscará más rápida la huida.
Tenía tantas
personalidades (máscaras) que en mi caso podía presuponer, pero el equipo
médico tratante tenía todo el historial en cuerpo entero para descifrar lo
evidente sin necesidad de adentrarse en el subconsciente.
Robin Williams te
dejaron que tú escribieras el guión, te pusieron las herramientas equivocadas
en escena y la DESESPERANZA bajó el telón, para mostrar solo el RIP – END
(FINAL).
DR. PABLO ALBAN
No hay comentarios:
Publicar un comentario